Porque las grandes transnacionales están se están haciendo cada vez con más parte del pastel –de productos, servicios y dinero– y son responsables de la debilitación o desaparición del comercio y producción local. Las transnacionales tienen tanto poder que a menudo los gobiernos y las organizaciones internacionales están a su servicio y no parece haber legislación ni poder que las pueda controlar.
El capitalismo industrial de los siglos XVIII y XIX, desarrollado de forma intensiva y extensiva a lo largo de la revolución industrial, se dedicaba sobre todo al comercio interno. El comercio con otros países desde el Norte se limitaba principalmente a la importación de materias primas para la industria y a la exportación de productos manufacturados.
La configuración de las grandes empresas se inicia en el siglo XX. Su poder y tamaño aumenta y empiezan a producir a otros países reproduciendo la actividad económica del origen.
A partir de la II Guerra Mundial se empieza a estructurar la situación que tenemos actualmente. En la participación internacional de las empresas –básicamente del Norte– se incorporan, además de la industria, los servicios y las finanzas.
Las transnacionales se empiezan a mover por la lógica de la maximización de beneficios en el mínimo tiempo posible. Dentro de esta lógica, la progresiva globalización neoliberal les sirve para poder expandirse por todo el planeta, obtener los recursos naturales de los lugares donde son más económicos, instalar las fábricas en los países donde obtienen las mejores condiciones laborales y ambientales y vender los productos y servicios a la clase consumidora global. Varios factores han facilitado este desarrollo: la mejora del transporte, la energía económica y sin fin, el crecimiento económico, las nuevas tecnologías de la información y la apertura de los mercados de los estados, bastante cerrados hasta entonces.
El crecimiento de su capacidad de influencia política ha ido en relación a su potencia económica. Progresivamente han dedicado parte de sus recursos económicos a promover gobiernos, poderes legislativos y judiciales favorables con un trabajo de presión (lobby), y a mantener una imagen pública favorable.
Actualmente de las 100 economías más importantes del mundo, 51 son estados y 49 empresas. Y las ventas de las 15 transnacionales españolas más importantes son superiores a la suma del PIB de Bolivia, El Salvador, Ecuador, Guatemala, Nicaragua, Paraguay, Uruguay y Chile.
Una empresa puede limitar el ámbito de actuación a su país, repetir en otros la misma actividad que en el país de origen –actividad multinacional– o formar parte de un entramado complejo de negocios interrelacionados que actúa con muchos brazos en diferentes estados –actividad transnacional.
Las organizaciones empresariales pueden dedicarse a una sola actividad o tener un abanico muy amplio de productos o servicios.
Las grandes empresas suelen tener todo un conjunto de organizaciones vinculadas o filiales, y lo hacen básicamente por dos motivos: comerciar entre ellas por debajo de los precios de mercado –buena parte del comercio mundial se realiza entre filiales de una misma transnacional– y conseguir ventajas económicas –como evitar el pago de impuestos o hacer movimientos económicos sólo permitidos en paraísos fiscales.
Las transnacionales convierten su poder económico en poder político y erosionan la soberanía de los países donde están presentes, y a menudo hacen que los gobiernos las protejan a pesar de ir en contra de los intereses ciudadanos.
Movimientos sociales del Sur y del Norte, y ONG de desarrollo han denunciado a las empresas transnacionales como actores que vulneren los derechos humanos.
Se han recogido múltiples denuncias por parte de poblaciones del Sur afectadas que las señala como un factor clave de su empobrecimiento y del mantenimiento de las dificultades que están teniendo millones de personas para vivir dignamente y disponer de un medio ambiente sano y sostenible.
Afirmaciones en esta línea han sido realizadas por Anand Grover, Olivier de Shutter u Okechukwulbeau, relatores especiales de Naciones Unidas en Salud, Alimentación y Residuos tóxicos, respectivamente. El año 2009, los también relatores Martin Scheinin y Manfred Nowak propusieron la creación de una corte internacional para los derechos humanos donde poder juzgar a estas empresas. Esta corte hoy todavía es inexistente.
Los lobbies o grupos de presión actúan en aquellos sectores que disponen de poder. En concreto, pueden dirigirse al sector político, para que gestione de determinada manera, al legislativo, para que sancione ciertas leyes, al judicial, para que arbitre moviendo la balanza en cierta dirección, o a otros (organizaciones empresariales, sociales, religiosas, etc.).
En algunos países alguna tarea de los lobbies es pública (en los EE.UU., por ejemplo, se informa de como mínimo una parte de los recursos económicos que se destinan a los partidos candidatos), aunque en la mayoría se hace a puerta cerrada.
Los lobbies pueden buscar intereses públicos o colectivos, como presionar para conseguir la eliminación de una deuda externa insostenible o que se juzgue a personas que han impulsado genocidios, o privados.
El trabajo del lobby busca impulsar iniciativas que interesen al sector que representan, como seguros públicos cuando se implantan en países del Sur, y frenar o dificultar aquellas que actúan en su contra, como una legislación ambiental restrictiva que dificulta el negocio de las petroleras.
Les empresas saben que hacer lobby les da muy buenos resultados. Por este motivo en Bruselas cuentan con más de 5 lobbistas por europarlamentario.
... sobre las empresas transnacionales
Las empresas transnacionales pueden impulsar la cobertura de necesidades y la creación de puestos de trabajo en los países empobrecidos.
... pero la práctica
Especialmente cuando pasen a gestionar servicios básicos como el agua, la electricidad o las telecomunicaciones, a pesar de expresar la firme voluntad de dar más cobertura a la población y ofrecer mejores servicios, a menudo se olvidan de garantizar un nivel de vida digno y buscan como único objetivo la rentabilidad económica. Esto tiene consecuencias nefastas para la población, como:
Por lo que se refiere al tema laboral, las transnacionales provocan:
... sobre las empresas transnacionales de los países del Sur
Las empresas de los países del Sur cuando se hacen transnacionales pueden incrementar sus beneficios e impulsar el crecimiento económico del territorio de origen.
... pero la práctica
La gran mayoría de transnacionales son de países ricos. De acuerdo con la revista Forbes, en el año 2011, de las 100 empresas más grandes 72 eran europeas o norteamericanas, mientras que había 5 de América Central y del Sur, y ninguna de África.
Muy a menudo estas corporaciones, cuyos beneficios permanecen en manos privadas, vuelven hacia el Norte o se van a paraísos fiscales, privatizan sus beneficios y socializan sus pérdidas. Esto significa distribuir las pérdidas económicas, sociales y ambientales entre las poblaciones del Norte y del Sur, con unos gobiernos que permiten que esto ocurra. Sería el caso de situaciones como:
El poder de las transnacionales va creciendo. Y no sólo por su potencia y tamaño económico, sino porque están en una situación inmejorable para presionar a los gobiernos para que actúen según sus intereses. Su fuerte implantación no quita que, al mismo tiempo, tengan suficiente flexibilidad para moverse por todo el planeta y sacar el máximo provecho de las diferentes oportunidades que obtendrán en cada lugar. Esto es, precariedad laboral, impactos severos en el medio ambiente, oportunidades y evasiones fiscales, etc. Todo esto con un único objetivo: ganar dinero a corto plazo, con el que se especulará y luego se repatriará.
Su fuerza tiene la connivencia de las instituciones financieras internacionales y de la OMC, así como de los gobiernos del Norte y del Sur que se dejan “asesorar” por sus lobbies.
Todo esto en general fomenta la vulneración sistemática de los derechos de millones de personas y del medio ambiente, gracias al poder de unas organizaciones nada democráticas.
1. VERGER, A. El subtil poder de las transnacionales. Colección Contraarguments número 2. Ed. Icaria, 2003
2. WEIS, H.; WERNER, K. El libro negro de las marcas; el lado oscuro de las empresas globales. Ed. De bolsillo, 2005
3. TEILTELBAUM, A. La armadura del capitalismo. Ed. Icaria, 2010
4. HERNÁNDEZ, J; RAMIRO, P. El negocio de la responsabilidad. Ed. Icaria, 2009
1. Respuestas a las empresas transnacionales http://rets.cat
2. Enlazando Alternativas http://enlazandoalternativas.org
3. Transnacional Institute http://www.tni.org
4. Observatorio de Multinacionales en América Latina http://omal.info
1 The Corporation (La corporación)
2. Discurso de Salvador Allende en las Naciones Unidas
4. Deteniendo los abusos de las transnacionales (Vídeo Latituds – TV3 y ODG; partes en catalán)
5. El segundo desembarco. Multinacionales españolas en América Latina
1. CARRIÓN, J. La Ir-Responsabilidad de Unión Fenosa: Nicaragua, Colombia y Guatemala. Informe número 4. ODG, 2011 http://www.odg.cat/navegacas.php?id_pagina=11&id_publicacions=36&publicacions=8
2. Sentencia del Tribunal Permanente de los Pueblos 2010, en su sesión "La Unión Europea y las empresas transnacionales en América Latina: políticas, instrumentos y actores cómplices de las violaciones de los derechos de los pueblos" http://www.enlazandoalternativas.org/spip.php?article731
1. A raíz de un trabajo colectivo para el 1r Foro Social Catalán en 2008, diferentes organizaciones que estaban haciendo seguimiento y denunciando las prácticas de algunas transnacionales, deciden crear una plataforma de trabajo coordinado: Respuestas a las empresas transnacionales (RETS).
2. La campaña “Supermercados no, gracias” desde Manresa y Barcelona denuncia los impactos del oligopolio de las grandes superficies en la producción y distribución de alimentos.
3. Las campañas “BBVA sin armas” y “Banco Santander sin armas” denuncian cómo estas entidades bancarias participan en el negocio de la guerra y en empresas y proyectos que vulneran los derechos humanos y el medio ambiente.
4. La campaña “Ropa Limpia” denuncia las malas prácticas laborales en países del Sur de la industria textil, y la falta de corresponsabilidad de las empresas de moda del Norte que compran el género.
1. El año 2004 se crea Enlazando Alternativas, una red formada por organizaciones de América Latina, el Caribe y Europa para denunciar, entre otros, el papel de las transnacionales europeas en América Latina. Fruto de la falta de un tribunal internacional donde juzgarlas, se coordina con la Fundación Lelio Basso para abrir el proceso del Tribunal Permanente de los pueblos; un tribunal de opinión sin validez jurídica pero con tota la validez moral que ha juzgado en sus 3 sesiones a más de 50 empresas.
http://enlazandoalternativas.org
Mis demandas
· Con mis compras o contratación de servicios no quiero favorecer la concentración de poder económico y político ni en grandes empresas ni en sus magnates.
· Quiero tener información clara y real de lo que hacen las grandes empresas en los países del Sur y a qué intereses responden, y que no escondan sus prácticas con publicidad cautivadora o grandes declaraciones de intenciones (la responsabilidad social corporativa) para hacer un lavado de imagen.
· Mi consumo no solo debe satisfacerme a mí sino que paralelamente no debe provocar la destrucción del medio ambiente –como una selva del trópico–, la precarización laboral –como por ejemplo la producción en zonas francas o en talleres de sudor–, o impactos negativos en comunidades –como el desplazamiento de una comunidad indígena de su territorio ancestral para la extracción de hidrocarburos o para la minería.
Mis acciones
· En la medida de lo posible dejo de consumir productos fabricados o distribuidos por empresas transnacionales y, cuando tengo que hacerlo, escojo las que aplican las políticas sociales y ambientales más justas.
· Priorizo los productos de circuitos cortos y de pequeñas empresas locales, y los de las empresas u organizaciones no lucrativas que aplican criterios de economía social y solidaria.
· Me informo sobre campañas que se están haciendo de boicot a empresas o gobiernos déspotas para valorar si quiero participar.
Las demandas de nuestros colectivos
· La creación de un código de cumplimiento obligatorio para las transnacionales de manera que el respeto a los derechos humanos y al medio ambiente no sea voluntario, sino que se extienda la responsabilidad de la empresa a sus filiales, proveedores y empresas subcontratadas, y la subordine a los estados receptores en coherencia con el derecho al desarrollo.
· La existencia de un tribunal internacional para juzgar los delitos de las empresas transnacionales de acuerdo con el nuevo ordenamiento.
· La obligatoriedad de un funcionamiento transparente que dé cuentas públicas de su funcionamiento y de su relación con el poder político, económico y financiero, y que sea supervisado por la sociedad civil organizada.
· La limitación, transparencia y regulación de los grupos de presión –lobbies– de las empresas, y la facilitación de la entrada de los movimientos sociales en los parlamentos y en los gobiernos para poder informar de los impactos de sus políticas y sugerir alternativas más justas.
· La limitación del poder económico y político de las empresas transnacionales, con la obligación de dividirlo cuando este poder pueda ser superior al de los estados donde operan.
Las acciones de nuestra organización
· Fortalecemos, con la contratación de nuestros productos y servicios, a cooperativas u organizaciones que apliquen criterios sociales y ambientales en sus prácticas.
· Monitorizamos las actuaciones de las transnacionales del país en el Sur y en el Norte, investigamos sus vínculos con la oligarquía y los poderes políticos y judiciales, y lo contrastamos con la información que las empresas hacen pública.
· Organizamos campañas de información de las prácticas de las grandes empresas y de boicot cuando son injustas socialmente o destructivas con el medio ambiente.
Las iniciativas a las que nos podemos adherir
Para una economía local y justa que aplica criterios solidarios y sostenibles tanto en el interior de la entidad como en lo que se refiere a su relación externa con otras personas, colectivos y recursos naturales.
Para la monitorización de las prácticas de las transnacionales en países del Sur, la denuncia cuando actúan con impunidad y la presión para que firmen compromisos con auditorías externas de buenas prácticas.
http://www.enlazandoalternativas.org/
Idea clave 1: la hipocresía se viste de sensibilidad
«Nuestra actriz consigue un vaso de leche y se lo da al niño que sigue en la puerta. La mirada de agradecimiento y felicidad del niño le lleva a pensar en todo lo que ella posee y no necesita».
Una escena: En un monólogo de humor, una actriz vestida de mujer de la alta sociedad explica las aventuras y desventuras de una famosa en la India.
Tres cuestiones para debatir:
- ¿El momento de conexión afectiva con la realidad —que va acompañado siempre de la figura del infante desprotegido del Sur— es un pequeño cambio para que todo siga igual?
- ¿Cómo es que las personas que fomentan las desigualdades y concentran la riqueza son las más dispuestas a participar en actos de caridad?
- ¿Recibir ayuda favorece la autonomía o la dependencia de quien la recibe?
Una realidad por descubrir: Forma parte de la fama participar en algún proyecto de «ayuda» a un país empobrecido. No sólo sirve para tranquilizar la propia conciencia, sino que también ayuda a llenar las páginas del corazón.
Otra realidad por la que luchar: La población no alimenta el onanismo de la gente famosa y denuncia su hipocresía cuando va de solidaria y sensible. Deja claro que los países del Sur no necesitan ayuda o caridad, sino cooperación entre iguales y el cambio de unas estructuras que generan desigualdad.
Idea clave 2: las personas que gobiernan están al servicio de los intereses del mercado
«El gobierno contento, si la empresa contenta también. A partir de ahora el mercado financiero controla, ¿a quién?, a las personas de carácter político»
Una escena: Una profesora de lenguaje de signos enseña a dos actrices cómo expresar diferentes ideas con las manos.
Tres cuestiones para debatir:
- Cuando el director del Bundesbank dice que el poder político estará «a partir de ahora» bajo el control de los mercados, ¿quiere decir que hasta ahora era independiente?
- Las empresas que el gobierno quiere que estén contentas, ¿son las pequeñas y medianas empresas, que se preocupan por la situación de su zona, las cooperativas con criterios de economía social y solidaria, o las grandes empresas?
- ¿Son muy diferentes las personas de los grandes partidos de las de las grandes empresas?, ¿o son las mismas que en ocasiones trabajan en un lugar y en otras están en el otro lado?
Una realidad por descubrir: Aunque hace mucho que ocurre, con la crisis actual queda patente que los gobiernos bailan al son que marca el mundo financiero y las consultoras que actúan como tentáculos de las transnacionales.
Otra realidad por la que luchar: La administración pública se dedica a limitar el poder de las transnacionales, a evitar que operen desde paraísos fiscales y a asegurarse de que paguen todos los impuestos que hasta ahora habían evadido.
Idea clave 3: la impunidad en el Sur de las transnacionales
«La no visibilización de los efectos que tienen las transnacionales en los países empobrecidos, ¿vale? Cómo, sistemáticamente, no se respetan los derechos humanos».
Una escena: El director y el ayudante de dirección reflexionan sobre la obra y sobre los temas que aún no han encontrado manera de tratar.
Tres cuestiones para debatir:
- ¿Por qué las grandes transnacionales no dan a conocer los impactos que provocan en países del Sur pero sí sus «ayudas» mediante sus fundaciones?
- ¿La economía local puede convivir con el poder de las transnacionales, o la existencia de éste ahoga a la primera?
- ¿El poder legislativo hace leyes que favorecen a las transnacionales porque éstas tienen muchos profesionales haciendo presión y no dispone de la otra visión de los movimientos sociales o lo hace conscientemente?
Una realidad por conocer: La imagen corporativa —el prestigio— es fundamental para una gran empresa. Por ello, las empresas más denunciadas por los movimientos sociales del Norte y del Sur buscan maneras de recibir premios y «reconocimientos» políticos por su gran «obra» en los países empobrecidos.
Otra realidad por la que luchar: La ciudadanía busca siempre que puede productos y servicios de empresas pequeñas y, cuando han de ser grandes, lucha para que sean públicas y así que no se creen grupos de poder poco controlables. Esto impacta positivamente en los pueblos del Norte y también en los del Sur en la medida en que no pueden actuar con tanta impunidad.
Algunas frases off the record
«Con esta energía me voy yo para que el coproductor no nos quite el dinero»
¿Lo más importante de la obra que se está construyendo es el dinero?
«Pretendía ser irónico»
¿Las poblaciones del Sur ven irónicas muchas de las actuaciones de los países del Norte en sus territorios?
«Las frases son muy negativas»
¿Lo son las frases o la realidad que muestran?
Toda la información sobre Limitando el poder de las transnacionales en un documento PDF
Folleto Empresas transnacionales; las top model de la economía (RETS)
Material de divulgación sobre estas empresas para sectores económicos (en catalán).
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